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miércoles, 9 de julio de 2014

A U T E N T I C I D A D





DEDICADO A CORAZONES BRILLANTES


En mitad de la noche, cuando todos duermen, es el momento perfecto para echar a volar la imaginación.  El escenario es todo mío.  No hay espectadores.  Nada ni nadie puede interrumpir este gran momento.  Sólo una pequeña bombilla de una vieja lámpara ilumina lo que podría ser una gran obra.  ¿Podéis verme? Vuelvo a estar aquí para dar rienda suelta a mis pensamientos.  ¿Qué sería de mí si no contara con la ayuda de este pequeño teclado?   Mi más leal confidente sin duda.

Esta es una gran noche.  La VERDAD,  palabra transparente de la que algunos se alejan por miedo.  Una palabra con la que muchos soñamos y a la que otros detestan. De ella y de su importancia quiero hablar en este preciso instante.

Como eterna defensora de la justicia, mi más profunda admiración por quienes dedican gran parte de su tiempo y energía en su lucha por encontrar la verdad.  Hay guerras que se dan por perdidas antes de comenzar la batalla, no obstante, Tiempo tiene la última palabra.
Si bien es cierto que un adversario con armas potentes y destructoras lo tiene mucho más fácil, nunca debemos decaer ni ceder a la manipulación.  El adversario posee radares capaces de captar nuestro miedo, impotencia y sensibilidad. Mantener la cabeza alta y el cuerpo erguido inutilizará la captación de ondas.

¿Armas destructoras?  Creedme  que existen.  Suelen venderlas a personas poseedoras de un corazón oscuro.  Sólo ellas son sabedoras de su manejo.  Son armas capaces de acabar con la autoestima y la dignidad de un ser humano.

¿Están autorizadas?  Lamentablemente sí. Algunos gobernantes las utilizan asiduamente cuando tienen que defender posturas sin argumento.
Entonces, ante tal armamento ¿Qué podemos hacer las personas defensoras de la paz, la justicia y la verdad?   ¡Lo tenemos francamente difícil!

Mostrad vuestras cartas pero no todas.  Guardaos las más débiles.

¿Recordáis a Picardía,  una muñequita preciosa de cabello color calabaza y grandes coletas?  ¿Podéis visualizarla?   Ella os ayudará.

Picardía es muy vivaracha.  Lista, muy lista.  Os explicará cómo debéis actuar ante un adversario con fondo oscuro.  Os mantendrá despiertos y hará que adquiráis seguridad ante una situación difícil.  Sed vosotros mismos y esperad.  Tened confianza.
Tiempo estará trabajando detrás del escenario las veinticuatro horas del día.  Él sabe que su misión es determinante.

¿Quién controla a Tiempo?  Él trabaja solo, es independiente.  Es honrado, paciente e increíblemente certero. No debéis preocuparos.   LA VERDAD SIEMPRE SALE A LA LUZ.  Ganar o no la guerra dejará de tener importancia.  Haber jugado limpio será vuestro mayor triunfo.  Las personas con fondo oscuro no saben jugar así.   Sólo quienes poseen un corazón brillante tienen ese privilegio.

¿Quiénes son poseedores de un corazón brillante?  Esta es una pregunta con una difícil respuesta.  Por el sendero de la vida nos cruzamos con personas muy dispares.  Ni mejores ni peores,  sólo distintas.  Una cosa he aprendido a lo largo de estos años,  cada uno de nosotros somos únicos e irrepetibles.  Esto es algo que se debería tener en cuenta sobre todo en la infancia.

Hacer ver a nuestros pequeños que todos somos poseedores de grandes cualidades, cada uno con las suyas bien definidas, inculcarles el amor hacia sus compañeros, el respeto y la solidaridad, haría que  estos adquirieran una sana auto-estima, desterraran el odio y crecieran con un corazón limpio.

La niñez es la etapa más importante en la vida de un ser humano.  La llamo “etapa de cimentación”.  En ella se instan las bases y se levantan los cimientos que soportarán la carga de años venideros.   Los pequeños necesitan de nuestra ayuda.  Ellos solos no pueden con tantos materiales.  Son demasiado frágiles y corren el riesgo de lesionarse.   Aleccionarlos, hacerles ganar confianza y mostrarles su valía hará de ellos unos niños felices con personalidades brillantes.  Un corazón oscuro no tiene cabida en alguien con estas cualidades.


AUTENTICIDAD, TRANSPARENCIA, VERDAD

Luchemos por estos valores.  Entre todos haríamos de este un lugar mejor.